Liliput

Casi nunca nos detenemos a observar lo diminuto. Pero cuando lo hacemos es como si encogiéramos por un instante y accediéramos a un mundo inexplorado y sorprendente que late debajo del nuestro, como si atravesáramos al otro lado de la lupa que nuestra mano sostiene y nos integráramos en esa especie de burbuja habitada por los seres pequeños: texturas asombrosas, complejísimos insectos y minúsculas flores de exquisita delicadeza.